Descubre los pasos necesarios para aprender a dejar de ser codependiente
El término «adicción a las relaciones» se utiliza habitualmente para describir la codependencia. Se trata de un trastorno mental y conductual que impide a las personas formar conexiones significativas con los demás. Aunque ser codependiente es perjudicial y desagradable, hay medidas que se pueden tomar para romper el ciclo.
La definición original de codependencia se centraba en la pareja de un adicto cuyas propias malas decisiones permiten o incluso animan al adicto a seguir consumiendo. Sin embargo, con el tiempo, el término ha llegado a abarcar a cualquier persona en una relación que sea emocionalmente abusiva o destructiva, no sólo a las parejas románticas.
Signos de codependencia
Los codependientes tienen buenas intenciones. Desean ayudar a un miembro de la familia que lo necesita. Sin embargo, desarrollan una dedicación compulsiva y potencialmente peligrosa a su trabajo.
A través de sus bienintencionados esfuerzos por ayudar, la persona que les importa se vuelve aún más dependiente de ellos. La mayoría de los codependientes se sienten satisfechos ayudando a los demás siempre que se les reconozcan sus esfuerzos. Para ellos es importante «ser necesitados».
Accede a estas otras útiles guías
Por desgracia, sus decisiones suelen salir mal. Esto puede hacer que se sientan prisioneros y desarrollen sentimientos de resentimiento. Pueden sentirse atascados en la relación e incapaces de hacer ningún cambio en ella.
Según mi experiencia, las relaciones con parejas de larga duración se deterioran. En lugar de afecto y consuelo, suelen estar plagadas de preocupación, frustración y lástima.
Las relaciones codependientes pueden convertirse en la norma para algunos individuos. Las personas que quieren ser animadas a desempeñar el papel de mártires suelen buscar amistades y parejas sentimentales.
Esto hace que las personas descuiden sus propias necesidades en favor de las de los demás.
La codependencia puede manifestarse de diversas maneras. Cuando uno de los miembros de una relación codependiente deja de dar prioridad a sus propias necesidades e intereses, todos los implicados sufren.
Ejemplos de codependencia
Las siguientes son las características de una relación codependiente:
Puede incluir lo siguiente en las relaciones entre padres e hijos:
- Ser sobreprotector con un hijo adulto que debería ser capaz de manejar sus propios asuntos.
- Ayudar económicamente a un hijo adulto puede proporcionarle un sentido o propósito en la vida.
- No dar nunca a un hijo ninguna responsabilidad.
- Abandonar la propia vida para cuidar a un padre anciano.
- Ceder a las exigencias de los padres a costa de otros compromisos y relaciones.
- Los problemas de relación o de comportamiento familiar no deben discutirse nunca.
En concreto, puede suponer lo siguiente en las relaciones sentimentales:
- Dedicar mucho tiempo y esfuerzo a cuidar de la pareja que tiene una adicción al alcohol o a las drogas.
- Justificar o endulzar las acciones negativas de la otra persona.
- Anteponer las necesidades de la pareja a las propias, al trabajo o a otros vínculos.
- Soportar los malos hábitos o los problemas de salud de la pareja.
- No dejar que su pareja tome las riendas de su propio destino.
- No dar espacio a su pareja para que persiga sus propios intereses.
Por qué sucede
La codependencia es un rasgo enseñado que se modela a partir de las acciones codependientes de los familiares cercanos. Es habitual que se transmita de una generación a otra. Por lo tanto, un niño que presencia a sus padres en una relación codependiente puede desarrollar comportamientos similares.
La codependencia se desarrolla en familias en las que se reprimen o ignoran emociones negativas como la ira, el dolor, el miedo o la culpa, como es habitual en los hogares disfuncionales. Los problemas de la estructura subyacente pueden ser:
- Adicción a las drogas, al alcohol, al trabajo, a la comida, al sexo, al juego y a las relaciones.
- Abuso (físico, emocional o sexual)
- Deterioro del cuerpo o la mente que persiste en el tiempo
En este hogar, nadie aborda nunca los problemas que se han ido acumulando. Cuando hay un problema, los codependientes tienden a ignorarlo. En un esfuerzo por ayudar al miembro problemático de la familia, los seres queridos suelen reprimir sus propios sentimientos y descuidar sus propias necesidades.
Todos los esfuerzos se centran en la persona abusiva, enferma o adicta. La persona codependiente pone las necesidades del familiar enfermo por encima de las suyas, a menudo hasta el punto de agotarse. Descuidar la propia salud, el bienestar y la seguridad suele conducir a resultados sociales, emocionales y físicos negativos.
Factores y características de riesgo
Aunque cualquiera puede caer en una relación de codependencia, ciertas personas son más propensas a hacerlo que otras. Los investigadores han señalado una serie de variables que suelen acompañar a la codependencia, entre ellas:
- Miedo a fracasar o a no tener éxito.
- Ansiedad por ser dejado u olvidado.
- Necesidad de ejercer dominio sobre los demás.
- Sentirse constantemente enfadado.
- Deshonestidad crónica.
- Poca capacidad de interacción con los demás.
- Problemas en la toma de decisiones.
- Problemas en las relaciones románticas.
- Problemas para establecer límites.
- Incomodidad con la alteración.
- Obsesión malsana por obtener elogios y admiración.
- Una propensión a infligirse dolor a sí mismo al recibir retroalimentación negativa.
- Una propensión crónica a ir más allá de lo que se espera de ellos.
- Falta de claridad entre el afecto y la simpatía.
- Un desproporcionado sentimiento de culpa por los actos de otras personas.
Los adultos criados por padres que abusan de las sustancias, que experimentan altos niveles de estrés en sus hogares, que tienen hijos con problemas de conducta y que cuidan de enfermos crónicos tienen un mayor riesgo de desarrollar codependencia, según los estudios. La codependencia es más común entre las mujeres que entre los hombres.
La codependencia es más frecuente en las profesiones asistenciales. Un tercio de las enfermeras padece codependencia de moderada a grave. El cuidado de los demás requiere que las enfermeras dejen de lado sus propias emociones y antepongan las necesidades de sus pacientes. El cuidado de los demás puede ser una fuente de orgullo para ellas, y este sentimiento puede impregnar su vida privada.
Identificación de relaciones codependientes
Aunque no hay un laboratorio o una resonancia magnética que pueda diagnosticar la codependencia, hay preguntas que puedes hacerte para ayudar a detectar los signos.
- ¿Cómo te sientes respecto a tu deber de ayudar a los demás?
- ¿Es tu intención influir en el curso de los acontecimientos y en las acciones de los demás?
- ¿Te da miedo dejar que las cosas sigan su curso natural y dejar que los demás sean ellos mismos?
- ¿Te sientes mal contigo mismo?
- ¿Intentas dominar las situaciones y a otras personas haciéndolas sentir impotentes ante tu impotencia, culpa, coacción, amenazas, consejos u otros medios?
- ¿Eres una persona a la que le cuesta pedir ayuda?
- ¿Hasta qué punto te sientes impulsado a ayudar a los demás aportando soluciones a sus problemas?
- ¿Hasta qué punto tiende a ocultar sus verdaderos sentimientos?
- ¿Le cuesta sacar a relucir los problemas en una conversación?
- ¿Bloquea las emociones e ideas molestas de su mente?
- ¿Juzga y critica su propio valor?
Si ha respondido «sí» a varias de estas preguntas, puede ser una señal de que muestra patrones de comportamiento codependiente en sus relaciones. Ver estas repeticiones por lo que son puede ayudarte a dar el primer paso para alejarte de la dependencia.
Cómo dejar de ser codependiente
La codependencia puede ser superada de forma individual por algunas personas. Algunas personas pueden estar motivadas para cambiar si logran comprender lo que significa ser codependiente y el daño que causa. A continuación se presentan algunas estrategias para superar la codependencia:
- Intenta detectar las marcas reveladoras de una pareja feliz. Hay que tener una idea clara de lo que supone una relación buena y afectuosa antes de poder esperar que se abandonen los comportamientos codependientes. La intimidad, el respeto mutuo, la comunicación abierta, el afecto genuino y el sentido de la igualdad son características de una pareja sólida.
- Mantén la distancia. Las relaciones sanas se caracterizan por el apoyo mutuo y el respeto recíproco al espacio personal del otro. Puedes definir tus límites en una relación estableciendo fronteras. Considera cuidadosamente lo que consideras tolerable. Esfuérzate por escuchar a la otra persona, pero no insistas en tus propias dificultades. Aprende a rechazar con elegancia las peticiones que te presionan demasiado. Poner límites y esforzarse por cumplirlos.
- Manténgase en buen estado de salud. Los codependientes suelen tener poca confianza en sí mismos. La codependencia puede superarse dando prioridad a las propias necesidades. Piensa profundamente en lo que quieres de la vida y en el tipo de cosas que te alegran. Dedique tiempo a sus pasiones. Sustituya los pensamientos destructivos o irracionales por otros más racionales y constructivos. Cuida tu salud emocional dándote el tiempo y el espacio que necesitas para comer, dormir y centrarte en ti mismo.
Algunas personas toman conciencia de su codependencia al leer sobre ella en los medios de comunicación. Otras consiguen liberarse de su codependencia debido a factores externos, como cuando uno de los miembros de la pareja se desintoxica o cuando uno de los miembros de la pareja empieza una nueva carrera que le obliga a dejar de cuidar.
Obteniendo ayuda
Sin embargo, la codependencia es un problema grave que a menudo requiere una intervención médica. La psicoterapia puede utilizarse para tratar esta condición. Hay una variedad de terapias terapéuticas que han demostrado mejorar la calidad de vida y enseñar a las personas a romper su dependencia de los demás.
Terapia de grupo
Diferentes tipos de terapias de grupo han demostrado ser prometedoras en el tratamiento de la codependencia. Las conexiones saludables pueden formarse en un entorno seguro y de apoyo, que es exactamente lo que ofrece la dinámica de grupo. La retroalimentación y la responsabilidad son componentes comunes de la terapia de grupo.
Hay una variedad de enfoques que se pueden adoptar en la terapia de grupo. Se utiliza alguna forma de terapia cognitivo-conductual en la que los miembros adquieren y practican nuevas habilidades.
El enfoque de los 12 pasos es utilizado por muchos otros grupos de apoyo a la codependencia. Las personas aprenden sobre la adicción a sus relaciones en un formato de grupo de 12 pasos. Se podría apuntar a mejoras en el autoconocimiento, la autoestima y la expresión emocional.
Terapia familiar
El objetivo principal de la terapia familiar es reparar los patrones de comunicación y otras dinámicas familiares que no funcionan. Los miembros de la familia se dan cuenta y son capaces de cambiar sus propias tendencias disfuncionales.
Uno de los principales objetivos de la terapia familiar es mejorar la comunicación. La terapia familiar puede sacar a relucir temas que nunca antes se habían explorado. A veces, las acciones de una persona (por ejemplo, conseguir la sobriedad o ayudar a otra a ser más autosuficiente) pueden afectar a la dinámica de toda la familia.
Terapia cognitiva
Durante la terapia cognitiva, es posible examinar y cambiar los hábitos de pensamiento destructivos que subyacen a las interacciones interpersonales. Alguien que cree que «no puedo soportar estar solo», es más probable que haga un esfuerzo adicional para mantener una relación insana. En la terapia, se puede trabajar para desarrollar la capacidad de tolerar los sentimientos difíciles y alterar los patrones de pensamiento destructivos.
Se espera que al lograr esto la otra persona modifique su comportamiento para mejor y asuma más responsabilidad por sus elecciones.
La mayoría de las personas codependientes imitan las interacciones que observaron cuando eran niños, por lo que el tratamiento puede llegar más atrás en el tiempo. Uno de los beneficios de la terapia es que puede ayudar a las personas a volver a conectar con sus sentimientos y a experimentar de nuevo una gran variedad de emociones.
Para terminar
Busque ayuda profesional si cree que puede ser codependiente en su relación y tiene dificultades para hacer cambios por su cuenta. Para empezar, puedes hablar de tu deseo de liberarte de la codependencia con tu médico de cabecera o con un experto en salud mental.
Considere la posibilidad de un asesoramiento en línea si no se siente cómodo reuniéndose con un terapeuta en persona o uniéndose a un grupo. Las sesiones de terapia pueden tener lugar en línea, a través de vídeo o chat en vivo, o por mensaje, lo que da a los pacientes la opción de tener sesiones en la comodidad de sus propios hogares.