La temporada de fin de año, a menudo sinónimo de reuniones familiares, celebraciones y la búsqueda del regalo perfecto, puede ser un torbellino de actividades. Entre la alegría y el ajetreo, es fácil sentirse abrumado por el ritmo frenético y la acumulación de detalles logísticos.
Tras semanas de intensa actividad, quizás anheles un refugio de tranquilidad para reencontrarte contigo mismo y adoptar un estilo de vida más consciente. Aquí te presentamos 10 maneras ecológicas de encontrar calma este invierno.
1. Prepara un Té Orgánico
Disfruta de una reconfortante taza de té orgánico para calentar tu espíritu en los días más fríos. Las infusiones son ricas en compuestos bioactivos como los flavonoides, que poseen propiedades antioxidantes y ayudan a neutralizar el estrés oxidativo en el organismo.
Diversos estudios sugieren que el consumo regular de infusiones puede contribuir a la longevidad y disminuir el riesgo de desarrollar ciertas afecciones crónicas, como la diabetes tipo 2 y enfermedades cardiovasculares.
Optar por tés orgánicos asegura que provienen de fuentes sostenibles y a menudo se presentan en formatos a granel o en bolsitas compostables, reduciendo el impacto ambiental.
2. Enciende Velas Sostenibles
Encender velas es un gesto clásico para crear un ambiente acogedor en invierno. Sin embargo, ¿sabías que la mayoría de las velas convencionales pueden liberar componentes volátiles y partículas finas en el aire, como benceno o tolueno?
Las alternativas no tóxicas incluyen velas de cera de abeja, de soja o de coco. No obstante, es crucial ser un consumidor informado. Algunas marcas incurren en «greenwashing», etiquetando productos como «a base de soja» aunque su porcentaje sea mínimo y el resto sea parafina.
3. Incorpora Decoración Natural
Si sientes que tu espacio necesita un cambio o tu estilo personal ha evolucionado, considera un pequeño ejercicio de desintoxicación visual y añade elementos naturales que aporten frescura y calma.
Las plantas de interior no solo embellecen, sino que también mejoran la calidad del aire y pueden transformar tu baño en un santuario personal. Un pequeño helecho colgante, una planta de serpiente en un rincón o incluso un potus sobre el lavamanos pueden hacer maravillas.
La inclusión de accesorios de bambú o yute, como cestas de almacenamiento o lámparas con pantallas de fibras naturales, es otra forma ecológica de generar una atmósfera más relajada. El bambú es un recurso renovable de crecimiento acelerado, lo que lo convierte en una opción más sustentable que la madera tradicional.
4. Elabora Productos Eco-Amigables
¿Qué tal preparar tus propios jabones artesanales para esos momentos de indulgencia en la bañera durante las tardes invernales? La triste realidad es que muchos envases terminan en vertederos o contaminando nuestros océanos.
Crear jabones en casa es un proceso gratificante y una excelente forma de ocupar el tiempo en un día fresco o lluvioso.
Comienza cortando una base de jabón neutro —puede ser de glicerina, aceite de coco o manteca de karité— en trozos pequeños y disuélvelos al baño María a fuego lento. Una vez líquidos, incorpora unas 20-25 gotas de tus aceites esenciales favoritos (lavanda, eucalipto, cítricos) y vierte la mezcla en moldes. Deja que cuajen y endurezcan por varias semanas antes de utilizarlos.
5. Adopta un Nuevo Pasatiempo
El dibujo botánico con lápices de colores o tintas ecológicas es una excelente vía para disipar el estrés y la ansiedad. La precisión y la atención al detalle requeridas te permiten concentrarte y desconectar de las preocupaciones diarias.
Si la melancolía invernal te acecha, pintar paisajes primaverales vibrantes o jardines florecidos puede transportar tu mente a épocas más cálidas y llenas de luz.
Alternativamente, explorar cursos en línea de fotografía con técnicas de bajo impacto ambiental, llevar un diario de gratitud o crear arte con materiales reciclados son otras aficiones sostenibles que podrías abrazar.
6. Da un Paseo al Aire Libre
Aunque la idea de salir a la intemperie cuando hace frío pueda parecer descabellada, las investigaciones demuestran que apenas un mínimo de dos horas semanales en la naturaleza puede potenciar tu bienestar mental y general.
Abrígate bien, calza tus zapatos cómodos y sal a explorar, incluso durante los meses más frescos. Aprovecharás los beneficios de la vitamina D natural en un día soleado, esencial para tu estado de ánimo.
Las carencias de vitamina D son más frecuentes en estaciones frías, y algunos estudios vinculan niveles bajos con un incremento en trastornos del ánimo, ansiedad y estados depresivos.
7. Practica Yoga o Meditación
Es un secreto a voces que el yoga y la meditación son herramientas poderosas para la relajación y el equilibrio. ¿Por qué no iniciar o profundizar una práctica invernal que te conecte con tu interior?
El yoga requiere solamente tu cuerpo y un espacio para moverte, lo que lo convierte en una excelente forma de relajarse sin generar residuos. Además, puedes enfocar tu práctica en intenciones ecológicas, fortaleciendo tu compromiso con un estilo de vida más verde y consciente.
8. Realiza un Acto de Bondad
La ciencia del comportamiento sugiere que la práctica constante de la amabilidad hacia los demás tiene un impacto significativo en nuestra propia felicidad. Y cuando somos más felices, la carga del estrés suele disminuir.
Considera ayudar a un vecino con tareas domésticas o prepara una comida nutritiva a base de plantas para un familiar que lo necesite. También puedes empezar la limpieza de primavera donando artículos en buen estado a un centro comunitario o albergue local.
9. Acomódate con Conciencia
Envuélvete en una manta cálida, disfruta de una bebida caliente y sumérgete en un buen libro este invierno. Vestirte con capas de ropa abrigadora, como sudaderas y jerseys, te permitirá ajustar la temperatura de tu hogar a un nivel más eficiente energéticamente.
Expertos en eficiencia energética recomiendan programar el termostato para bajar la temperatura unos pocos grados Celsius durante al menos ocho horas al día. Mantener el ambiente alrededor de 18-20°C durante el día es ideal en invierno, y puedes reducirlo aún más por la noche o cuando no estés en casa.
10. Desconecta
En ocasiones, la forma más efectiva de hallar serenidad en los meses fríos es simplemente desconectar. Guarda tu teléfono, portátil y tableta, atenúa las luces y déjate llevar por el momento presente.
Tus amigos y familiares podrán contactarte más tarde, cuando decidas retomar tus redes sociales y encender tus dispositivos. Permítete un respiro digital para una relajación profunda.
Relájate de Forma Sostenible este Invierno
Puedes cuidar del planeta y de tu salud mental al mismo tiempo, aplicando estas técnicas de relajación eco-amigables durante esta temporada fría.
Acerca del Autor
Jane es una escritora especializada en medio ambiente y la fundadora y editora en jefe de Environment.co, donde comparte contenido sobre vida sostenible y ecología.
